Estimar a priori la excavabilidad de un macizo rocoso para
realizar explanadas suele ser una de esas cuestiones que inquietan a los
integrantes de las obras. Parece evidente que, tanto la dureza de la roca
matriz como el grado y orientación de sus fisuras condicionarán la técnica y
rendimiento de la metodología utilizada, en este artículo hablaré sobre este
tema.
Cuando me plantean esta cuestión, suelo recomendar que
hablen con los profesionales locales del movimiento de tierras, os sorprendería
lo que puedes llegar a aprender si sabes hacer las preguntas adecuadas y
escuchas con atención.
Como a un consultor se le suele pedir algo más “técnico”,
aunque no por ello más “útil”, entonces pido datos sobre la velocidad de las
ondas sísmicas longitudinales (ondas p). Aquí, ya sueles captar la atención del
oyente, pero cuando ya lo rematas, es cuando le dices que con ese dato se puede
entrar en la figura inferior y determinar la técnica más adecuada para la
excavación.
Evidentemente no quieres romper la magia del momento con
información secundaria referente a la tabla, como el hecho que se trata de una
tabla realizada por una firma comercial
de máquinas ripadoras, que ésta refleja únicamente la capacidad de
trabajo de una técnica específica, concretamente un riper de diente único de
390 CV y otros detalles que seguro nadie dará mayor importancia.
Tras este primer místico momento, suele plantearse la
pregunta de como conseguir el dato ese de la velocidad de las ondas esas. La
respuesta es contratando a una empresa que realice sísmica de refracción y
encargándoles el correspondiente análisis, en el cual podrá verse algo parecido
a la figura de abajo, donde de forma colorista, se representa la distribución
de velocidades de onda en un perfil concreto.
Otra posibilidad, que cada vez veo más, es obtener los datos
de velocidad de ondas sísmicas desde los ensayos Cross-Hole. Estos ensayos
permiten obtener un perfil sísmico entre dos columnas de sondeo, tal y como se
ve en la figura inferior.
Simplificando y con todas las precauciones que se nos puedan ocurrir, diríamos que por debajo de los 1000 m/s el
terreno es excavable con maquinaria tradicional ( típica giratoria de 20-25 tn)
de los 1000 m/s a los 2000 m/s necesitarás maquinaria más potente y posible ayuda con martillos rompedores y/o
ripadoras y a partir de los 2000 m/s ya toca sufrir (poca producción y muchas
molestias) o empezar a pensar en la utilización de explosivos.
En este punto, algún lector detallista puede preguntarse
donde ha quedado aquello que he dicho en el primer párrafo
“Parece evidente que, tanto la dureza de la roca matriz como el grado y orientación de sus fisuras condicionarán la técnica y rendimiento de la metodología utilizada”
La respuesta es que la metodología arriba apuntada asume que
la velocidad de onda sísmica ya valora los aspectos mencionados (*)
(*)Nota la
margen. Aquel que este tipo de afirmaciones le violente hasta
hacérsele insoportable su día a día, mejor que deje esto de la geotecnia.
Si esta respuesta no es suficiente o, como pasa muchas
veces, no tenemos datos de la velocidad sísmica, podemos recurrir a
metodologías que asocian la excavabilidad con propiedades geomecánicas relativamente
sencillas de obtener, como pueda ser el grado de fracturación y la dureza de la
roca matriz. Abajo os pongo dos típicas figuras que nos permiten llegar a una
propuesta de técnica de excavación.
Con las anteriores figuras, mirando las cajas de los sondeos
y un martillo ya puedes atreverte a decir algo, pero insisto, como una buena
conversación con el paisano de la zona que lleva 2 generaciones moviendo piedras,
no hay nada mejor para indicarte si acabarás utilizando voladura o no.
Por cierto, nunca os habéis preguntado, con el dinero que
llegó a gastarse el coyote en dinamita para pillar al correcaminos, no le hubiera sido más
rentable pagarse un buen restaurante ¿?????
Os dejo dos artículos que en su día publiqué, no van de
voladuras pero si de algo muy relacionado, las vibraciones.
Un saludo
y
Gracias por vuestro tiempo
Gracias Juanjo, comí siempre chapeau, muy didáctico, ameno, práctico y divertido.
ResponderEliminarGracias a ti por tu visita Glicerio.
EliminarSiempre informativos, útiles y divertidos tus comentarios. Saludos de un caminero de Barcelona que siempre vio la Geotecnia como algo esotérico (tal vez lo es).
ResponderEliminarGracias por tu visita.
EliminarSiempre tan instructivo como entretenido. Gracias por compartirlo con todos nosotros, Juanjo.
ResponderEliminarGracias por tu tiempo.
EliminarSi metes tanta información en una entrada de blog, al final vas a romper el internet!! :-D
ResponderEliminarQuè bueno!! Ya puedo hacerme pasar por geólogo en obra civil!! ;-)
Si Ana Mato cuela como ministra cómo no vas a poderte pasar como geólogo.
EliminarUn abrazo
excelente!! muy interesante y divertida, ojalá huberan profesores que explicaran así en la universidad.
ResponderEliminarLamento haber tardado tanto en hacer un comentario, pero uno no siempre tiene un rato libre para echar un ojo a tu magnífico blog.
ResponderEliminarYo sí tuve un profesor en la escuela que explicaba exactamente esto; D. Fernando Plá
Y después de explicar todos estos ábacos y conceptos, terminó la clase con un chascarrillo de los suyos:
"En caso de duda, voladura"
Cordiales saludos