lunes, 26 de septiembre de 2011

Muros pantalla autoportantes, el efecto trampolín.


En este post planteo el hecho que los muros pantalla autoportantes pueden implicar movimientos importantes en cabeza, con los consiguientes asientos en el trasdós.

La razón es sencilla, aunque algún que otro técnico se resista a entenderla, si hay esfuerzo hay deformación ( principio de acción reacción) y si esa deformación la integro tengo un movimiento.

Un muro pantalla autoportante funciona como un voladizo o si queréis, como un trampolín, fijaos en el paisano de la foto, después hablaré de él.


Pongamos a lo dicho algún número




Para poner un orden de magnitud a lo comentado, utilizo la típica analogía estructural entre en una viga en voladizo y la mitad de una viga biapoyada.


En el diseño de las vigas ( un muro pantalla es asimilable a una viga) se dimensionan éstas para que soporten los esfuerzos previstos y lo hagan con unas deformaciones admisibles.

La magnitud de estas deformaciones admisibles dependerán de la función de la viga, pero podríamos poner, como límite de referencia, que la flecha máxima en el centro de vano sea 1/350 la longitud de este vano.

Ahora imaginemos un muro pantalla autoportante con una altura de 3 metros.

Este muro pantalla es asimilable a un tramo en voladizo, pero que su punto de empotramiento estará algo por debajo de la cota de máxima excavación, en este caso y para simplificar consideremos que estará a la cota -5,00 (dependerá de las características del terreno, magnitud de sobrecarga, etc..).

Aplicando la analogía mencionada, este muro lo podemos asimilar a una viga biapoyada de 10,00 metros. Si a esta viga le aplicamos el criterio de 1/350, obtenemos una deformación en centro de vano de 28,57 mm, es decir, nuestro muro pantalla se ha movido horizontalmente en cabeza, prácticamente 3 cm.

No olvidemos que el muro, estructuralmente estará diseñado para soportar los esfuerzos asociados a los empujes del terreno. Aquí estamos hablando de deformaciones, las cuales, para armados “normales”, son más restrictivas que los esfuerzos de flexión y corte.

Ese movimiento de 3 centímetros en la cabeza del muro pantalla será lo más visible de un campo de movimientos en todo el terreno del trasdós del muro, el cual puede afectar a elementos preexistentes como pudiera ser un edificio medianero.

Resumiendo, los muros pantalla autoportantes, en la medida que soportan empujes, se deforman, y debido a su diseño, esta deformación implica movimientos importantes, por lo que pueden afectar a la estabilidad de elementos situados en el trasdós, siendo necesario verificar que el nivel de movimientos esperados es compatible con las características de los posibles elementos estructurales a afectar.

Que hago yo??? Pues, como verificar estas cosas me da pereza ( prefiero dejárselo a los de los colorines, léase elementos finitos). Si en el trasdós de un muro pantalla tengo estructuras sensibles a movimientos, en la medida de mis posibilidades, no utilizo autoportantes, eso sí, si la alternativa son muros encofrados por bataches, mejor el autoportante.

Os dejo tres enlaces a artículos de GEOJUANJO relacionados con lo aquí explicado.


También os dejo un video muy simpático del paisano del trampolín, el cual tampoco fue consciente de que el asiento en cabeza puede dar problemas






Gracias por vuestro tiempo.

juanjo


4 comentarios:

  1. Sólo una puntualización de quisquilloso:
    "si hay esfuerzo hay deformación ( principio de acción reacción)"
    El principio de acción y reacción no dice nada de deformaciones, sólo de fuerzas.

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  2. Tienes toda la razón Pablo, tómatelo como una licencia bloguera.

    Un saludo y gracias por tu tiempo.
    Es una gozada saber que te leen gente como tú

    ResponderEliminar
  3. Pablo, me lo he pensado mejor, tu comentario bien merece una corrección.
    un saludo

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  4. Rectificar es de sabios...

    (Es una gozada saber que gente como tú se siente honrada por mis visitas)

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