En otro artículo de GEOJUANJO (Escudos para perforar. 200 años de historia.)
ya mencioné la siguiente máxima sobre perforación que en su día me regaló un
paisano perforista que estaba haciendo anclajes.
Perforar tiene dos dificultades, arrancar el material de
abajo y subirlo, también tiene una putada, que el agujero se mantenga abierto
para poder seguir.
La verdad es que dicho así no parece tan difícil esto de
perforar, pero ya os digo que tiene lo suyo, prueba de ello es la ingente
cantidad de metodologías que existen. Dicho lo anterior, me pongo como reto
intentar, mediante tres artículos, desarrollar un poco la sentencia del paisano
perforista.
Dificultad 1: Arrancar el material.